CARTA A RAMÓN DÍAZ. Cadete panameño de gran prestigio y sobre todo ejemplar...

Estimado Ramón: Han pasado muchos años, algo así como 37, desde que te graduaste como Subteniente en el legendario Colegio Militar "Eloy Alfaro" de Quito y no he podido borrar de mi mente al hombre sencillo, educado y respetuoso con sus subordinados. No he olvidado a esa persona que dió mucho prestigio a nuestra querida institución a pesar de haber sido delegado de un país hermano como Panamá. Fuiste de aquellas personas cuyo talante excepcional se distinguía del resto de sus compañeros.

Fuiste un extraordinario atleta y sobre todo me gustaba mucho el ritmo que imponías a tu guitarra cuando diste prestigio a la estudiantina del Colegio.

¿Personas como tú...? ¡muy pocas!...y tú sabes que mi paso por la institución va más allá de los 40 años, de ahí la certeza de lo que digo. Por eso, he dedicado unas cortas palabras en este día de tu cumpleaños para desearte lo mejor de lo mejor porque te lo mereces y pido que Dios y la vida te siga bendiciendo.

Aprendí mucho de tí. Aunque casi nunca hablamos porque no eramos amigos, -eras mi más antiguo- admiré tu ejemplar trayectoria, emulé tu perseverancia y decisión pero nunca pude seguir tu carisma y tu calidad humana porque fuiste de aquellas personas que jamás se enojaba por tonterías y pasaba riendo como que la vida no era tan seria como ustedes de instructores nos planteaban.

Así fue Ramón Díaz: un entrañable ser humano; una persona singular; y, un soldado excepcional a quien con afecto saludo en este día.

¡Con aprecio y estima..!! Oswaldo Moreno